Desde hace algunos meses, los buques rusos se vuelven cada vez más agresivos con los buques ucranianos en el Mar Negro y el Mar de Azov. Ahora Ucrania está preparando una respuesta más amplia, con la ayuda de Estados Unidos.
A mediados de septiembre, funcionarios de Ucrania tomaron posesión de dos cutters de la clase Island de la Guardia Costera de EE.UU. en Baltimore. El traslado se produce en medio de las incipientes hostilidades marítimas, que las autoridades ucranianas temen que puedan anunciar una segunda oleada de acciones agresivas de las fuerzas armadas rusas.
Rusia mantiene una gran base naval en Sebastopol, en la península ucraniana de Crimea, que Moscú confiscó ilegalmente en 2014. Hacia el 14 de agosto, Rusia comenzó lo que muchos llaman un bloqueo del Estrecho de Kerch, que conecta el Azov con el Mar Negro.
«Los expertos en Ucrania dicen que esta podría ser la próxima operación [rusa] desde este flanco, desde el mar, cerca de Mariupol», dijo Valeriy Chaly, embajador de Ucrania en Estados Unidos, en una entrevista en agosto en la embajada ucraniana.
Funcionarios estadounidenses y ucranianos dicen que la actividad militar rusa también ha aumentado en el Mar de Azov, que Ucrania y Rusia comparten legalmente en virtud de los tratados firmados en 2003.
Esta es una declaración del 30 de agosto del Departamento de Estado: «Estados Unidos condena el acoso de Rusia al transporte marítimo internacional en el Mar de Azov y el Estrecho de Kerch. Rusia ha retrasado cientos de barcos comerciales desde abril y en las últimas semanas ha detenido al menos 16 barcos comerciales que intentaban llegar a puertos ucranianos».
El mensaje de Ucrania ha sido más urgente. «Están militarizando el Azov, trayendo sistemas de armas y más tropas», dijo Chaly. «Es una situación desproporcionada porque Rusia tiene más barcos. Quieren imponerse en el Mar Negro y en Azov no sólo contra los ucranianos, sino también a nivel internacional… De hecho, Rusia quiere mantener el control y no permitir el libre acceso de los barcos».
No se trata sólo de conquistar territorio marino. El objetivo más amplio de Moscú es agravar las dificultades económicas de Ucrania, con el fin de exacerbar los conflictos civiles y acelerar el colapso del gobierno anti-ruso de Poroshenko.
Perdemos dinero a través de nuestros puertos. Rusia está tratando de destruir esta oportunidad para Ucrania», dijo Chaly. «Es otra herramienta de presión económica para no permitirnos tener una relación comercial normal. Es absolutamente inaceptable».
Los cutters de la clase Ilkand, que pueden llevar una ametralladora de 25 mm y varias ametralladoras calibre.50, pero son pequeños, comparados con lo que los rusos pueden desplegar. El Gobierno ucraniano aprobó la compra de 10 millones de dólares en septiembre.
«No podemos crear una flota como la que tiene Rusia, pero sí podemos crear la llamada flota Mosquito: barcos pequeños, pero muchos de ellos», dijo Chaly.
La armada ucraniana también lleva a cabo unos ejercicios llamados Sea Breeze con la 6ª Flota de los Estados Unidos, cuya 18ª edición tuvo lugar en julio. Forma parte de los esfuerzos de Ucrania para seguir desarrollando la interoperabilidad con la OTAN.
Fte. Defense One
