La teniente responsable del equipo Pegaso Central de la Guardia Civil ha explicado a El Radar qué tipo de tecnologías antidrón tienen, cuáles son sus misiones y por qué es importante concienciar sobre el «uso que le estamos dando a los drones».
Las vulnerabilidades que se pueden presentar en nuestro espacio aéreo se han incrementado en los últimos tiempos con la proliferación del uso de vehículos aéreos no tripulados (UAV).
Su empleo por parte de organizaciones criminales supone una amenaza a nivel global (lo hemos visto recientemente en el ataque de Yemen a Israel), por lo que disponer de tecnologías antidrón (sistemas técnicamente denominados C-UAS), se ha convertido en algo imprescindible tanto para las Fuerzas Armadas como para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
En España, la utilización de drones (UAV o UAS, por sus siglas en inglés) por parte de organizaciones criminales, fundamentalmente dedicadas al narcotráfico, hizo necesaria la creación de equipos especializados que contaran con sistemas C-UAS.
A los equipos Pegaso de la Guardia Civil les compete garantizar la custodia de fronteras, puertos y aeropuertos
Y en ese contexto nacieron los equipos Pegaso de la Guardia Civil, cuya misión principal es el control de la aviación ligera y la seguridad aérea.
Estos equipos (El Radar ya estuvo con Pegaso Madrid) están desplegados por toda España y, a diferencia de los equipos similares con que cuenta la Policía Nacional, a la Guardia Civil le compete garantizar la custodia de fronteras, puertos y aeropuertos, así como centros e instalaciones que por su interés lo requieran.
«El control de fronteras es prioritario en nuestro servicio diario»
El Radar ha hablado con la teniente que está al frente de Pegaso Central, cuyos efectivos pertenecen a la Jefatura Fiscal y de Fronteras.
Sus funciones, al igual que el resto de equipos Pegaso, abarcan desde el control de la aviación ligera, garantizar la seguridad de infraestructuras críticas, pasando por la vigilancia en grandes eventos o la protección de personalidades cuando visitan España, hasta obtener información para colaborar con la Policía Judicial si se produce, por ejemplo, un accidente aéreo.
«El control de las fronteras y en concreto la seguridad de los aeropuertos es prioritario en nuestro servicio diario», explica la teniente.
La mayor parte de los drones que intercepta Pegaso Central no son peligrosos
Los equipos Pegaso entre sus funciones están especializados en operar con drones y sistemas antidrón. Pero, fundamentalmente, emplean estos últimos, porque su misión principal consiste en «neutralizar aquellos drones que sobrevuelan sin autorización el espacio aéreo», explica la responsable de Pegaso Central.
Esos casos se pueden producir «tanto por negligencia del operador, o porque el dron está siendo empleado por una organización criminal y representa una amenaza para la seguridad nacional», añade.
«Un vuelo de un dron en una zona no permitida puede provocar un grave accidente»
De hecho, la mayor parte de los drones que interceptan en Pegaso Central no son peligrosos. «Más del 99 % son usuarios de UAV que no cumplen la normativa o que están perturbando en zonas concretas; y normalmente es porque no son conscientes de ello», se lamenta.
Pero hay que tener en cuenta que «un vuelo de un dron en una zona no permitida puede provocar un grave accidente por interferir el vuelo de otras aeronaves o, incluso, que el dron caiga sobre personas o vehículos que circulan».
Y también insiste en que «por el hecho de que no haya prácticamente amenazas [en el área de responsabilidad del equipo Pegaso Central] no quiere decir que esas amenazas no existan», advierte.
«Nuestro objetivo nunca es derribar el dron»
Y para luchar contra ellas, el equipo Pegaso Central, cuenta con tecnologías avanzadas de detección e inhibición del UAV… aunque la teniente sugiere que «la tecnología avanza muy rápidamente, por lo que hay que disponer de equipos en constante actualización y conocer las nuevas tecnologías que surgen».
Los sistemas antidrón que tiene en dotación el equipo Pegaso Central, ubicado en una zona próxima al Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, «disponen de tecnología soft kill, es decir, que cuentan con un sistema de radiofrecuencia para interferir en el funcionamiento del UAV».
Y es que, al contrario de lo que muchos podrían suponer, «el objetivo -aclara la teniente- es interferir en el funcionamiento del dron para que se interrumpa la comunicación entre el operador y la aeronave, pero nunca derribarlo, porque su caída podría ocasionar daños a las personas sobre las que el UAV se precipitase».
«Sería deseable que se ampliasen el tipo de sistemas de detección»
En la actualidad, en Pegaso Central cuentan, como medios de detección portátiles, de tecnológica española que les permite la visualización de drones en la tablet que llevan incorporada.
«Nosotros necesitamos medios de detección que sean lo suficientemente ligeros como para transportarlos nosotros mismos y que puedan instalarse fácilmente para un despliegue rápido», especifica la teniente. «Y también sería deseable -prosigue- que se ampliasen el tipo de sistemas de detección».
«Nuestro cometido principal está basado en los sistemas antidrón»
En este sentido, la teniente destaca que la Secretaría de Estado de Seguridad dispone del Sistema Global Contra Drones, que, mediante un despliegue a nivel nacional de equipos de detección e inhibición, tanto fijos como móviles, permite la prevención y respuesta de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Pegaso Central también cuenta con drones, que mediante cámaras térmicas admiten la medición de la temperatura en puntos y áreas, así como alertas de alta temperatura, por ejemplo. «Los drones nos ayudan muchísimo para vigilar entornos, localizar operadores de UAV no autorizados… pero -insiste- nuestro cometido principal está basado en los sistemas antidrón».
El modelo de los equipos Pegaso de la Guardia Civil se está ‘exportando’ a otros países
Otros equipos Pegaso, según explica la teniente a El Radar, están luchando contra el narcotráfico en Andalucía. Y cita la región andaluza porque ahí comenzó a gestarse la idea de crear este tipo de equipos especializados en la Guardia Civil, allá por el año 2016, para luchar precisamente contra las organizaciones criminales dedicadas al tráfico de drogas, tanto mediante el control del vuelo de drones como de la aviación ligera.
Unos equipos cuyo modelo, nos cuenta, se está presentando a otros países de nuestro entorno y a agencias europeas con responsabilidades en el ámbito de la Seguridad. Y eso es porque funcionan bien. Y, cuando algo funciona bien, la tendencia es imitarlo.
A modo de ejemplo, la teniente explica que ya se está colaborando con Francia y Portugal, y que cuerpos como el de Carabinieri están integrando este tipo de equipos con sistemas antidrón en sus estructuras.
«Hay que concienciar sobre el uso que le estamos dando a los drones»
Tanto la teniente, como sus compañeros de Pegaso Central reflexionan en voz alta sobre «el uso que le estamos dando a los drones». Mal uso, en muchos casos, y sobre ello quieren concienciar. «Todo avance tecnológico hace que nosotros, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, mejoremos -dice la teniente-, pero también mejoran los ‘malos’… y ahí es donde radica el problema».
Los equipos Pegaso comenzaron su andadura con un proyecto piloto en la Unidad Fiscal y de Fronteras de Madrid-Aeropuerto de Barajas. El equipo Pegaso Central fue el último en crearse, en 2021, y se consolidó en octubre de 2023.
Efectivos de los equipos Pegaso de la Guardia Civil ya están en París para integrarse en el dispositivo de seguridad de los Juegos Olímpicos
Una de sus misiones más significativas se produjo durante la presidencia española de la UE. Y, en ese periodo (de julio a diciembre del año pasado), jugaron un papel fundamental para garantizar la seguridad en la reunión informal de Jefes de Estado y de Gobierno que se celebró en Granada.
Ahora, también habrá despliegue de equipos Pegaso españoles durante la celebración de los Juegos Olímpicos de París 2024. Allí, junto con otros miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de España y otros países, se integrarán (ya lo están haciendo) en el dispositivo de seguridad establecido para garantizar la seguridad de participantes y asistentes a uno de los mayores eventos deportivos del mundo.
Y eso es porque funcionan bien. Y si los equipos Pegaso lo están haciendo bien… los ciudadanos estamos mucho más seguros.