Uno de los tanques rusos más extraños que ha aparecido en Ucrania ha sido el cazacarros anfibio 2S25M de 18 toneladas. Diseñado para las fuerzas aerotransportadas, su desarrollo comenzó en la década de 1980, pero su producción no se inició hasta 2001. En 2009 sólo había 24 en servicio. Tras el inicio de la invasión de Ucrania, se hicieron pedidos de más de estos destructores de tanques.
Desde el final de la Unión Soviética en 1991 y la reducción del personal militar en un 80%, los 45.000 paracaidistas se convirtieron en la fuerza de infantería más empleada, considerada como fuerza de élite, deseosa de hacer frente a cualquier desafío y, cuando llegó la guerra de 2022 en Ucrania, eran la infantería más fiable y eficaz de que disponía Rusia. Los ucranianos fueron la oposición más formidable a la que se habían enfrentado las tropas aerotransportadas y sufrieron casi 5.000 bajas (muertos, heridos, desaparecidos) durante el primer año de guerra.
Además, las fuerzas aerotransportadas perdieron la mayoría de los vehículos blindados especiales que se les entregaron, aerotransportados BMD, anfibios y fáciles de trasladar en aviones militares de carga, y que podían ser lanzados en paracaídas.
Existen varias variantes del diseño básico del BMD, una de ellas el 2S25M, un vehículo de orugas modificado al que se le había añadido una torreta, tripulación de tres personas. En lugar de seis combatientes de infantería y una torreta con un cañón automático, el cazacarros transportaba 40 proyectiles 125mm., para ser disparados por el mismo cañón de 125 mm que llevan la mayoría de los carros rusos.
El 2S25M monta un autocargador que contiene 22 disparos completos o misiles listos para su uso. El misil era un ATGM (misil guiado antitanque) lanzado desde el cañón de 125 mm de ánima lisa, que puede alcanzar objetivos a 4.000 metros de distancia. Esta distancia era el doble de la que podían alcanzar con precisión los proyectiles antitanque o de alto poder explosivo.
Lo que no tiene el 2S25M es protección alguna contra las armas contracarro, incluidos los RPG. El blindaje del 2S25M protege a la tripulación del fuego de las ametralladoras y de los fragmentos de proyectiles, pero no de los cohetes o proyectiles antitanque.
Los cazacarros se desarrollaron durante la Segunda Guerra Mundial y, aunque algunos modelos sin torreta tenían un blindaje igual al de los tanques, la mayoría no. Rusia sigue usándolos sin torreta y fuertemente blindados. La única excepción es el 2S25M, en el que el peso ligero y la capacidad anfibia eran más importantes. El 2S25M es rápido para ser un vehículo tipo tanque, capaz de moverse a 70Km/h. en carretera, 45 fuera de ella y 10 en el agua. La autonomía en carretera con combustible interno es de 500 kilómetros.
En Ucrania, las tropas aerotransportadas intentaron ser sigilosas con sus cazacarros, pero los ucranianos dispusieron de muchos exploradores y vehículos aéreos no tripulados para localizar a los blindados rusos y, por lo general, los destruyeron rápidamente con gran variedad de armas.
Ese patrón llevó a los rusos a la pérdida de la mayoría de los tanques y otros vehículos blindados durante los primeros meses de lucha. Ahora, todo lo que los rusos tienen disponible son tanques antiguos como el T-55 y el T-62, así como otros especializados como el 2S25M. Debido a la experiencia de Ucrania, las fuerzas aerotransportadas están recibiendo más cazacarros, pero no para su uso en Ucrania. En su lugar, se destinarán a apoyar a las tropas aerotransportadas en zonas de combate menos hostiles (para los vehículos blindados). Incluso con la nueva producción, Rusia no tiene previsto construir más de cien destructores de tanques, incluidos los entregados antes de la guerra de Ucrania.
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