Utilizando el chasis de un viejo vehículo de reconocimiento BRM-1K y un sistema de mortero 2S9 Nona-S de gran torreta, los ucranianos han creado un cañón-mortero autopropulsado único.
Con una gran cantidad de vehículos militares anticuados en sus existencias, los ucranianos trata de devolver al servicio la mayor cantidad posible de equipos en un corto período de tiempo para compensar las pérdidas sufridas en la guerra con Rusia, a través del reciclaje. En los depósitos permanece gran número de vehículos de reconocimiento, que se están convirtiendo en vehículos de combate mediante la instalación de módulos de combate y torretas de los BMD soviéticos, incluido el Nona-SV, que también se creó sobre la base del BMD-1.
El 2S9 Nona-S es un mortero autopropulsado de origen soviético. Fue desarrollado en la década de 1970 para mejorar la movilidad de los morteros que servían en las divisiones de asalto aéreo. Además, proporciona fuego directo y capacidad antitanque limitada. El 2S9 es uno de los sistemas cañón-mortero más numerosos del mundo.
Este sistema de mortero puede emplearse como mortero u obús, efectuando fuego directo o indirecto. El alcance máximo de fuego es de 8,85 km con proyectiles ordinarios, 12,8 km con proyectiles asistidos por cohetes y 7,1 km con minas. El alcance mínimo es de 1,7 km con proyectiles estriados y de 400 m con minas. El Nona-S puede atacar vehículos blindados.
Fte. Defense Blog