El Ejército de EE.UU. adjudicó recientemente a la Universidad de Illinois-Urbana Champaign un acuerdo de cooperación de cuatro años, por valor de 8 millones de dólares, por el desarrollo de tecnologías clave, que permitan a los vehículos aéreos y terrestres no tripulados funcionar con cualquier tipo de combustible, de modo que aumenten su rendimiento, fiabilidad y eficiencia. La universidad investigará la química multi-combustible integral y las tecnologías auxiliares de encendido, que aumentan la energía de los motores para un encendido fiable.
«La flota de sistemas de aeronaves no tripuladas del Ejército a menudo experimenta problemas de rendimiento y fiabilidad debido a las variaciones de las propiedades del combustible», dijo el Dr. Mike Kweon, gerente de programa del Programa Versátil Tactical Power and Propulsion Essential Research Program del laboratorio.
Los motores requieren una mezcla de aire y combustible, y una fuente de ignición, ya sea de chispa o de compresión, para funcionar. En el caso de los motores de encendido por compresión, la energía térmica generada por la compresión es insuficiente, si se emplean combustibles de baja calidad de encendido, especialmente a grandes alturas y en condiciones de frío.
Para ello, la Universidad de Illinois-Urbana Champaign investigará la química de la ignición de los combustibles utilizando algoritmos de aprendizaje automático, desarrollarán materiales para nuevas tecnologías de auxiliares de ignición para vehículos aéreos no tripulados de combustible flexible, e investigarán tecnologías avanzadas de propulsión para efectos de lanzamiento aéreo de alta velocidad en colaboración con científicos e investigadores del Ejército.
Este proyecto de investigación dirigido por la universidad es uno de los 11 financiados este verano por el laboratorio corporativo del Ejército, como parte de los esfuerzos del Centro de Propulsión de UAS para desarrollar tecnologías para motores híbridos-eléctricos con capacidad para múltiples combustibles. Cada universidad asociada está ayudando al Ejército a abordar la demanda de energía necesaria para alimentar los futuros vehículos no tripulados. El Ejército otorgó fondos adicionales para investigaciones similares a varias universidades.
La investigación, que está previsto que comience este otoño, forma parte de una cartera de investigación más amplia de tecnologías de capacidad multi-combustible dirigida por el laboratorio que apoya la prioridad de modernización del Ejército para el programa Future Vertical Lift. Más recientemente, el laboratorio anunció el desarrollo de un nuevo y avanzado modelo científico que permitirá a los especialistas en mantenimiento de vehículos recurrir a combustibles derivados de la biomasa en lugares austeros, así como los esfuerzos para convertir un generador casero en una fuente de energía para vehículos autónomos terrestres y aéreos.
Fte. army.mil
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