Con la llegada a Reino Unido, Google ha finalizado recientemente el tendido de su cable submarino de Internet Grace Hopper, tras su tendido la enorme extensión del océano Atlántico, conectando Nueva York, con Reino Unido y España.
Este enorme cable lleva el nombre de la pionera informática Grace Hopper. El cable llegó a Bude, Cornualles, en la costa occidental del Reino Unido y, la otra parte a Bilbao, en el norte de España.
En total, el cable se extiende a lo largo de 3.900 millas (6.276 km) del lecho marino. Se espera que el cable esté operativo en 2022. Una vez que esté en pleno funcionamiento, transportará unos 350 terabytes de datos por segundo.
Según los responsables de Google, tendría la capacidad de manejar «17,5 millones de personas transmitiendo vídeo 4K simultáneamente»
Google también dijo que el Grace Hopper usará una nueva técnica llamada «conmutación de fibra», que ayudará a que su transferencia de datos sea más fiable incluso durante las interrupciones.
Jayne Stowell, negociadora estratégica de la infraestructura global de Google Cloud, dijo: «Con la pandemia en curso fomentando una nueva normalidad digital, los cables submarinos financiados por Google nos permiten planificar y prepararnos para las futuras necesidades de capacidad de nuestros clientes, sin importar en qué parte del mundo se encuentren».
Y añadió: «La arquitectura de conmutación multidireccional es un avance significativo para tiempos inciertos, e integrará más estrechamente la próxima región de Google Cloud en Madrid en nuestra infraestructura global,»
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