La secretaria de Estado de Defensa ha presentado las líneas generales de la nueva Estrategia de Tecnología e Innovación para la Defensa, destacando de ella sus dos objetivos principales, “contribuir al desarrollo de las capacidades militares que son necesarias mediante soluciones tecnológicas avanzadas que proporcionen la necesaria ventaja y superioridad sobre el adversario” y “contribuir a conformar la base tecnológica e industrial Nacional de cara a que se disponga de las capacidades necesarias para la defensa y tener libertad de acción”, durante el desayuno informativo organizado por el Club Diálogos para la Democracia titulado Estrategia de Tecnología e Innovación de Defensa para unas Fuerzas Armadas del siglo XXI.
Asimismo, ha destacado y desarrollado las dos grandes novedades que introduce dicha Estrategia, por un lado “la necesidad de unir Planeamiento de Defensa con Base Tecnológica e Industrial” de manera que las entidades que conforman esta última conozcan las necesidades actuales y futuras de defensa; y en segundo lugar la demanda de cooperación de la I+D+i de defensa, tanto en el ámbito nacional, con otros actores del ámbito público y privado, como en el internacional a través de los diferentes marcos en los que España participa, y destacando sobre todos ellos el que representa la Unión Europea y su nueva política de defensa.
Teniendo en cuenta el momento en que nos encontramos, de mirada al futuro tras el impacto social y económico que la pandemia ha tenido en España, Esperanza Casteleiro ha expuesto el gran potencial del Ministerio de Defensa para el desarrollo de proyectos que encajarían en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia “España Puede”, y cómo desde el Departamento se sigue una política activa para mostrarlo a otros Departamentos de la Administración General del Estado y a las Comunidades Autónomas. “En el Ministerio de Defensa hemos optado por una política activa para mostrar a otros departamentos de la Administración General del Estado, e incluso las Comunidades Autónomas, las grandes posibilidades de este Ministerio para generar proyectos trasversales y tractores con implantación en gran parte del territorio nacional”, ha afirmado.
En concreto, ha confirmado que el Ministerio ha preparado más de 250 proyectos “susceptibles de ser elegidos» como financiables mediante el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia que ha lanzado la Unión Europea: 21 grandes proyectos con impacto en áreas geográficas que generarán empleo a gran escala y con un fuerte componente I+D+i con impacto dual; 61 proyectos en el área de transformación digital por valor de 5.500 millones de euros; más de 140 proyectos para mejorar la eficiencia energética de las instalaciones del Ministerio de Defensa; y cerca de 20 proyectos de movilidad sostenible que nos aproximarán al objetivo 0 emisiones.
Ya en el turno de preguntas se han planteado una disparidad de temas como son: la venta de armamento a Venezuela, del que la secretaria de Estado de Defensa ha afirmado que “no es que excluyamos esa posibilidad, es que ni siquiera se ha planteado”; Arabia Saudí, a lo que Casteleiro ha constatado que “se ha tardado en llegar a una solución para el control de venta de armas, pero estamos probando que ese modelo es el que queremos y nos responde a la exigencia de que haya realmente un control; o el Brexit, del que la secretaria de Estado ha recalcado que “todavía no se ha abordado el acuerdo militar entre Reino Unido y España, pero naturalmente tiene que hacerse. Seguiremos colaborando y coordinándonos, pero por el momento no se ha materializado”.
El evento también ha contado con la presencia de D. Fernando Abril-Martorell, presidente ejecutivo de Indra, que ha hecho hincapié en el potencial que tiene la industria española de Defensa de hacer una gran contribución a la reconstrucción de nuestra economía y a una estrategia de reindustrialización de España. “Cada euro invertido en Defensa genera 2,5 euros en el conjunto de la economía”, ha afirmado.
Por su parte, Luis Furnells Abaunz, presidente ejecutivo de Tecnobit – Grupo Oesía, ha recalcado que los retos a los que nos enfrentamos para garantizar la seguridad de nuestra sociedad son cada vez más complejos. “Nunca ha sido tan importante hablar de la industria de la Defensa como en el momento actual debido a la diversidad de las amenazas que hoy nos contemplan. Nuestra seguridad está en la vigilancia de las fronteras y el espacio aéreo, nadie lo duda, pero cada vez más, reside en otras fronteras difíciles de identificar, como es el ciberespacio, en la seguridad de nuestras comunicaciones y de nuestros datos, entorno en el que los ataques son cada vez más numerosos y sofisticados. La clave está en el desarrollo tecnológico”, ha constatado.
Santiago Bolibar Piñeiro, presidente del Consejo de Administración de Hisdesat, ha destacado el papel fundamental de la industria: “En época de crisis, la industria es motor fundamental de recuperación, y su investigación y desarrollo el combustible futuro de ese motor. Dentro de esa industria, la de Defensa, que precisa una gran inversión en I+D+i, conlleva un fuerte desarrollo industrial”.
Finalmente, Belén Gualda, presidenta de Navantia, ha querido recordar el retorno que generan los productos que exportamos y que van más allá de la defensa nacional: “Tenemos un retorno de los productos estratégicos para nuestra defensa nacional que se traduce en empleo y en sostener una industria que va más allá de los objetivos estratégicos de seguridad nacional”.
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