Turquía espera, que la entrega del controvertido sistema ruso de defensa con misiles S-400 comience en julio, dijo el presidente Recep Tayyip Erdogan el domingo a los medios de comunicación de su país.
«Creo que el S-400 comenzará a llegar en la primera quincena de julio. Los encargados de la programación están siguiendo el tema», dijo Erdogan según la cadena de televisión CNN Turk.
El acuerdo de Ankara con Moscú ha sido una fuente importante de tensión entre Turquía y Estados Unidos, y Washington ha amenazado con imponer sanciones a sus compañeros de la OTAN.
El Secretario de Defensa interino de Estados Unidos, Patrick Shanahan, envió una carta a principios de este mes advirtiendo a Turquía que debe renunciar al sistema S-400 antes del 31 de julio, de lo contrario, los pilotos turcos que actualmente están entrenando en el programa de aviones de combate F-35 serían expulsados de Estados Unidos.
Turquía planea comprar 100 F-35 estadounidenses, mientras que varios fabricantes turcos están fabricando piezas y equipos para el avión de guerra.
Ankara aún no ha respondido formalmente a la carta de Shanahan, pero Erdogan dijo que «en poco tiempo, quizás esta semana, se enviará una carta de respuesta».
Se mantuvo firme en que Turquía no se retiraría del acuerdo con Moscú. » El asunto del S-400 ha terminado. No hay dificultades», dijo Erdogan, hablando con periodistas turcos en su avión a Turquía tras una visita a Tayikistán para asistir a una cumbre.
«Si ahora nos tragamos nuestras palabras, esto no cumpliría con los hábitos de nuestro estado, y tampoco se ajustaría a mis principios de estadista», añadió Erdogan.
Se esperaba que las primeras entregas pudieran comenzar este mes, pero el conglomerado de defensa Rostec, de propiedad estatal rusa, dijo a principios de junio que había planes para comenzar las entregas en dos meses.
Washington ha instado a Ankara a comprar misiles Patriot de EE.UU. en su lugar y ha advertido a Turquía que se enfrenta a sanciones en virtud de la Countering America’s Adversaries Through Sanctions Act (CAATSA), que prohíbe hacer negocios con los sectores de defensa e inteligencia estatales y privados de Rusia.
Pero Ankara ha insistido en que el país se está preparando para cualquier posible sanción estadounidense.
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