El presidente turco Tayyip Erdogan se ha negado a desistir de la compra prevista por Ankara del sistema ruso de defensa antiaéreo S-400, que según Estados Unidos comprometería la seguridad de los aviones F-35.
Por esa razón, el Pentágono ha suspendido la entrega de equipo F-35 Joint Strike Fighter a Turquía, informaron el lunes Mike Stone y Humeyra Pamuk, de Reuters. El equipo de apoyo ahora suspendido es necesario para preparar la llegada del avión furtivo, según informaron a Reuters el lunes las dos fuentes familiarizadas con la situación.
El anuncio: «En espera de una decisión inequívoca de Turquía de renunciar a la entrega del S-400, se han suspendido las entregas y actividades relacionadas con el despliegue de la capacidad operativa del F-35 de Turquía», dijo el teniente coronel Mike Andrews de la Fuerza Aérea del Departamento de Defensa. Se espera que Turquía reciba los sistemas S-400 en julio. Los F-35 habrían llegado a Turquía en noviembre.
Por qué es importante esta suspensión: Es «el primer paso concreto de Estados Unidos para bloquear la entrega del avión a un aliado de la OTAN», según Reuters. También es «la última de una serie de disputas diplomáticas entre Estados Unidos y Turquía, incluyendo las demandas turcas de que Estados Unidos extradite al clérigo islámico Fethullah Gulen, las diferencias sobre la política de Oriente Medio y la guerra en Siria, y las sanciones a Irán».
¿Una oportunidad? «Más importante aún», escribe Marcus Weisgerber, de Defense One, «el Pentágono dice que ahora está buscando nuevas compañías para fabricar las piezas del F-35 actualmente fabricadas en Turquía. Esto incluye piezas de los motores, pantalla de la cabina, cableado eléctrico, fuselaje, revestimientos compuestos, puertas de bahía de armas y conductos de entrada de aire compuestos».
Fte. The D Brief