Después de décadas combatiendo a guerrilleros y terroristas, Francia se está reorientando hacia Rusia y China con mayores presupuestos, entrenamiento intensivo, divisiones más fuertes y nuevos vehículos blindados, de forma similar, pero con un enfoque muy diferente, al de Estados Unidos.
Los ejércitos francés y estadounidense han intercambiado oficiales generales para coordinar los preparativos para el ejercicio Warfighter 21-04 que tendrá lugar el próximo abril.
Francia está aumentando su presupuesto de defensa por primera vez después de décadas de declive, y desea colaborar con EE.UU. contra las amenazas rusas y chinas. Pero eso no significa comprar armas de EE.UU., copiar la doctrina de EE.UU., o abrazar la obsesión de EE.UU. con la alta tecnología.
«El Ejército francés tiene quizás un enfoque menos tecnófilo que otros ejércitos», dijo el General de División Michel Delion, que dirige el Centro de Doctrina y Enseñanza del Mando del Ejército Francés (CDEC). Sí, trabajar junto a EE.UU. requiere de interoperabilidad, dijo Delion en un webinar de la Association of the US Army. Pero aún más importante, argumentó, es la dimensión humana, lo que requiere aumentar los intercambios de oficiales.
Un general francés de una estrella es el comandante adjunto de la 3ª División del Ejército de EE.UU., y desde enero, un estadounidense de dos estrellas sirve como comandante adjunto de la 3ª División francesa, que operará como unidad subordinada al III Cuerpo del Ejército de EE.UU. en el Warfighter 21-04. (Los ejercicios de cuadros son pruebas de estrés para los puestos de mando, no para las tropas de rango, cuya participación es en gran parte simulada).
«Nuestro desafío no es técnico», acordó el general de división Todd Wasmund. «La mayoría de nuestros desafíos tienen que ver con nuestra normativa», dijo, que a menudo impiden que los dos ejércitos compartan información, en particular datos de inteligencia, incluso cuando sus tecnologías son técnicamente capaces de intercambiarla.
Dicho esto, todavía hay muchos detalles técnicos que resolver. Pero los franceses ven la solución en implantar normas técnicas comunes, no en comprar el mismo hardware. Es mejor buscar la «compatibilidad de los estándares» que comprar «equipo estandarizado», dijo Delion. Las futuras amenazas y crisis serán diversas, argumentó, por lo que las naciones aliadas necesitan mantener una diversidad de enfoques diferentes para igualar, en lugar de intentar clonar a EE.UU.
Claro que las dos democracias industrializadas están adoptando enfoques muy similares para amenazas similares. Ambas se esfuerzan por aplicar nuevas estrategias centradas en la disuasión de los conflictos con las grandes potencias, aun cuando siguen ensimismadas en la lucha contra la insurgencia y el terrorismo en todo el mundo. «Sólo en el año 2019, hemos sufrido 23 muertos en acción y más de 500 heridos», dijo Delion. (EE.UU. sufrió 22 muertes en Afganistán en 2019, 12 en Irak y cinco en Siria).
Ambos ejércitos tienen unidades combatientes en Europa del Este para disuadir a los rusos: 300 soldados franceses con docenas de vehículos blindados se han desplegado en Lituania. Ambos están cada vez más preocupados por China. El jefe del Ejército francés, el general Thierry Burkhard, se preocupa públicamente por los territorios franceses de la Polinesia y Nueva Caledonia, que hacen de Francia una potencia del Pacífico.
Ambos ejércitos están dejando de hacer énfasis en el adiestramiento para operaciones de contrainsurgencia y antiterrorismo y volviendo a centrarse en ejercicios para conflictos de alta intensidad entre estados. Ambos están prestando menos atención a las operaciones independientes de brigadas y fortaleciendo formaciones de alto nivel como la división y el cuerpo de ejército, que son el foco del ejercicio Warfighter que se realizará en abril. Ambos países están invirtiendo en inteligencia artificial, espacio, guerra cibernética/electrónica, defensa aérea del campo de batalla y redes inalámbricas de mando y control, y ambos se están embarcando en grandes modernizaciones de sus fuerzas armadas.
Pero los detalles son muy diferentes. Tomemos esa modernización, por ejemplo. El desarrollo de vehículos blindados franceses se encuentra más avanzado, son menos ambiciosos técnicamente y significativamente más ligeros que el Optionally Manned Fighting Vehicle, de hasta 50 toneladas, que EE.UU. está planeando para reemplazar al M2 Bradley.
Este es el reflejo de una larga historia de amor de Francia por los blindados ligeros con ruedas, que no sólo son más baratos de construir y operar, sino que también son fáciles de desplegar y operar en territorios distantes con puertos pobres y puentes endebles, como Malí o Nueva Caledonia.
Ahora, Francia y Alemania están estudiando un nuevo Main Ground Combat System (MGCS) para reemplazar sus actuales Main Battle Tanks, Leopard II alemán y LeClerc francés. Pero el plazo de entrega de un vehículo es de 15 años, tiempo suficiente para que el proyecto se descarrile como tantos otros ambiciosos esfuerzos inter-europeos.
Lo que Francia está comprando aquí y ahora es el programa SCORPION, de producción nacional, estimado en 6.800 millones de dólares, que incluye mejoras de hasta 200 LeClercs, y que está enfocado a blindajes más ligeros y con ruedas. (Sólo para probar que el EE.UU no tiene el monopolio de los acrónimos torpemente artificiales, el nombre formal del proyecto francés es Synergie du COntact Renforcé par la Polyvalence et l’Info valorisatION). El plan actual prevé la compra:
- 1,872 Griffons 6×6, un nuevo vehículo blindado multipropósito con ruedas similar al Stryker americano. El Grifón pesa alrededor de 25 toneladas, con versiones que van desde el transporte de tropas hasta las ambulancias blindadas y porta-morteros. El Ejército francés ya tiene 105 de los vehículos y ha comenzado a probarlos en condiciones desérticas en Djibouti. Bélgica ha acordado comprar también 382.
- 300 Jaguars 6×6, un vehículo de reconocimiento con torreta armado con un cañón automático de 40 mm, construido sobre el chasis del Griffon y que también pesa unas 25 toneladas. Bélgica comprará 60. Las entregas del Jaguar están programadas para comenzar el próximo año.
- 2.038 Servals 4×4, transpoetes blindados de 17 toneladas capaces de transportar una tripulación de dos y seis pasajeros. La entrega comenzará en 2022.
- 1,000 VBLs 4×4 (Véhicules Blindés Légers), un blindado de más de tres toneladas comparable a los JLTVs y Humvees blindados americanos. A diferencia de los nuevos Griffon, Jaguar y Serval, el VBL entró en servicio en la década de 1980.
El programa SCORPION se desarrollará gradualmente hasta «una revisión completa de los equipos principales para 2030-2032», dijo hoy Delion. El plan a corto plazo, dijo, prevé «un grupo de combate SCORPION [es decir, un batallón] en 2021, y luego una brigada SCORPION en 2023».
Fte. Breaking Defense
Sé el primero en comentar