El Departamento de Defensa de los Estados Unidos está preparando una nueva estrategia para el uso del espectro electromagnético que se dará a conocer el próximo verano.
«El espectro electromagnético (EMS) nos presenta un desafío», dijo a los periodistas el mayor general de la Fuerza Aérea, Lance Landrum, subdirector del Equipo de Operaciones del Espectro Electromagnético del Secretario de Defensa, durante una mesa redonda celebrada en diciembre por la Association of Old Crows en Alexandria, Virginia.
«Nuestra dependencia del espectro electromagnético, la forma en que nuestros sistemas dependen de él… nuestros competidores ven esa dependencia, y la ven esa dependencia como una posible vulnerabilidad».
El Defense Department Electromagnetic Spectrum Operations Cross Functional Team, que se puso de pie en abril, está liderando el esfuerzo con la oficina de información principal del DOD.
El equipo fue creado de acuerdo por disposición de la 2019 National Defense Authorization Act, que exige al DOD la creación de un equipo de guerra electrónica para garantizar que se puedan llevar a cabo con éxito las operaciones de espectro electromagnético.
El equipo, que incluye representantes de todas las ramas militares, del Cyber Command, del Estado Mayor Conjunto y de otros hace recomendaciones. Se encarga de la implementación de la estrategia, del personal y de la capacitación, las capacidades futuras, la inteligencia, así como de la integración del ciber, el espacio y el EMS.
El objetivo es fusionar dos estrategias existentes: la estrategia de espectro electromagnético del DOD para 2013 desarrollada por el CIO y la estrategia de guerra electrónica del mismo Departamento, en una política única: la Electromagnetic Spectrum Superiority Strategy.
Landrum dijo que el equipo multifuncional y la oficina del CIO han hecho progresos en la estrategia y esperan que se publique a finales del verano de 2020. La guía detallada de implementación para los ejércitos se emitirá tras la publicación de la estrategia.
Pero es más que simplemente otra estrategia. Landrum dijo que debería haber un conjunto general de normas conjuntas, pero advirtió que «es demasiado simplista» desarrollar una norma y hacer que todos la cumplan porque ciertas plataformas y sistemas tienen requisitos diferentes.
«Tenemos una tonelada de sistemas heredados que, nos guste o no, están bajo sus propios estándares», dijo. «Por lo tanto, tenemos que averiguar cómo abordar todas estas normas diferentes y reunirlas de alguna manera».
Landrum añadió que tales estándares necesitan evolucionar con el tiempo con la tecnología y necesitarían requisitos lo suficientemente dinámicos para permitir la interoperabilidad, la reprogramación y la vinculación.
El equipo recién formado también ha comenzado un estudio de análisis de la fuerza de trabajo de un año de duración, que se centrará en la identificación de la mano de obra militar y civil del EMS y en una mejor comprensión de la trayectoria profesional, la formación, la educación, la cultura, la tutoría y el desarrollo profesional.
Landrum dijo que ya han transcurrido un par de meses del estudio y que analizarán cómo esas cosas «crean una cultura y una mentalidad dentro de esa fuerza de trabajo que tenga una unidad, cohesión e identidad con el área de la misión del espectro electromagnético».
El equipo también está muy enfocado en la gestión de la batalla electromagnética para ayudar a los comandantes a tomar mejores decisiones operacionales, al tiempo que comprenden los riesgos asociados, dijo.
Y aunque él no lo calificaría como un dominio de la guerra ni diría si los países competidores como Rusia y China están a la cabeza, Estados Unidos necesita una estrategia y un conjunto de normas para obtener una ventaja. «Es un espacio de maniobras físicas. Es un espacio de batalla físico que nuestros comandantes tienen que conocer», dijo.
Fte. Defense Systems
