Necesitamos «concentrarnos más en las amenazas de China y Rusia», dice el vicepresidente del Estado Mayor Conjunto, el General Hyten.
Estados Unidos pone fin a su misión de combate en Irak, anunció el lunes el Presidente Joe Biden, aunque las tropas estadounidenses permanecerán en el país para seguir adiestrando y asesorando a las fuerzas locales.
«Nuestro papel en Irak será… estar disponibles para seguir formando para hacer frente al ISIS cuando surja, pero a finales de año ya no vamos a participar en misiones de combate», dijo Biden al comienzo de una reunión en el Despacho Oval con el primer ministro iraquí, Mustafa Al-Kadhimi.
Biden dijo que Estados Unidos sigue comprometido con «nuestra cooperación en materia de seguridad y nuestra lucha compartida contra el ISIS es fundamental para la estabilidad de la región y nuestra cooperación antiterrorista continuará incluso cuando pasemos a esta nueva fase de la que vamos a hablar».
Actualmente, hay unos 2.500 soldados estadounidenses en Irak. En la sesión informativa de la Casa Blanca del día 26, la secretaria de prensa Jen Psaki declinó dar detalles sobre cuántas tropas se quedarán en Irak más allá del final de este año para proporcionar entrenamiento y asesoramiento.
«Creemos que este es el paso natural y siguiente en estos diálogos estratégicos en curso y que estamos pasando a una fase en la que no estamos terminando nuestra asociación, sino que estamos manteniendo una presencia en Irak con una misión diferente», dijo. «Se trata de un cambio de misión, no se trata de eliminar nuestra asociación o nuestra presencia o nuestro estrecho compromiso con los líderes iraquíes».
El cambio de misión en Irak se produce cuando Estados Unidos también está a punto de terminar la retirada de Afganistán, a pesar de que algunos expertos temen que el terrorismo pueda prosperar en el país sin la presencia militar estadounidense.
En un evento de la industria de la defensa, el vicepresidente del Estado Mayor Conjunto, el general John Hyten, dijo que la retirada de Irak es necesaria para garantizar que nuestras fuerzas armadas estén preparadas para luchar contra China, o tal vez contra Rusia, si llega ese día.
«Llevamos mucho tiempo enfrentándonos a una amenaza importante en Oriente Medio. Para defendernos de ella, hemos necesitado mucha sangre y dinero, y el hecho de que no se haya producido ningún ataque a gran escala desde el 11 de septiembre de 2001 contra Estados Unidos es un logro notable de todo el gobierno, pero sobre todo de los soldados, marineros, aviadores e infantes de marina que han hecho ese trabajo a lo largo de los años», dijo Hyten en la presentación del Emerging Technologies Institute, un nuevo centro privado centrado en acelerar la innovación militar.
«Pero puedo decirles que el principal riesgo para esta nación, el riesgo a largo plazo, es China», dijo Hyten. «Quizá el riesgo más cercano sea Rusia. Y tenemos que concentrar nuestra atención en ellos. Eso significa, y lo han visto en Afganistán y lo están viendo ahora en Irak, y no voy a hacer ningún anuncio hoy, porque es el trabajo de la gente del otro lado del río hacer esos anuncios. Pero lo que pueden ver es que entendemos que no tenemos que ignorar las amenazas en Oriente Medio, sino ocuparnos de la amenaza de Oriente Medio de una manera diferente, con una huella más pequeña, para poder desviar más nuestro cuerpo en las amenazas en China y Rusia».
Las tropas de combate estadounidenses se desplegaron en Irak en 2003 con el objetivo de librar a Irak de armas de destrucción masiva y derrocar al dictador Saddam Hussein. Las operaciones de combate terminaron en 2010, y casi todas las tropas se fueron al año siguiente, para tener que volver en 2014 a combatir el ascenso del Estado Islámico.
Fte. Defense One
