Era el cabecilla de una organización criminal de ciberdelincuentes y realizaba su actividad delictiva desde la capital rumana. Sobre él pesan cientos de denuncias y 33 requisitorias judiciales de varios tipos y de diferentes juzgados de toda España.
La Policía Nacional y la Guardia Civil han desarticulado una organización criminal de ciberdelincuentes dedicada a realizar estafas a través de internet en todo el territorio nacional.
En el marco de la operación ha sido detenido en Bucarest (Rumanía) el cabecilla de la organización, un ciudadano español que realizaba su actividad delictiva desde la capital rumana y que, según los agentes, era uno de los ciberdelincuentes más activos en España.
De hecho, sobre él pesan centenares de denuncias en toda España por diferentes tipologías de estafas, y 33 requisitorias judiciales de varios tipos y de diferentes juzgados también de toda España.
Más de 55 identidades usurpadas y, al menos, 10 millones de euros
De la investigación llevada cabo hasta la fecha han aflorado más de 55 identidades usurpadas con cientos de cuentas bancarias abiertas con las mismas, y movimientos por más de 10 millones de euros.
Entre los ciberdelitos que cometía se encuentran: la suplantación mediante secuestro de cuentas de WhatsApp y solicitud de dinero a contactos; apertura de cuentas bancarias usurpando identidades; contratación de micro préstamos a nombre de terceros; obtención de claves bancarias suplantando la identidad de instituciones mediante correos electrónicos (phishing); o ataques de ingeniería social utilizando SMS (smishing).
Durante su detención, los agentes españoles comprobaron que contaba con una impresora industrial para imprimir documentos de identidad en soporte físico que empleaba para la apertura telemática de cuentas bancarias con identidades usurpadas o falsas. El dinero que obtenía fraudulentamente lo empleaba en la compra de criptomonedas.
De hecho, en el registro practicado en su domicilio de Bucarest también se intervinieron, entre otro material, una estación de minado de criptomonedas, dos ordenadores portátiles, discos duros de una CPU de sobremesa, varias tarjetas bancarias fraudulentas.
La investigación comenzó gracias a denuncias ciudadanas
Durante la fase de investigación, que se inició en 2021 a raíz de las denuncias efectuadas por distintos ciudadanos que describían un modus operandi similar en el tipo de estafas que habían sufrido, los agentes identificaron a cinco miembros de la organización criminal en las provincias de Murcia, Málaga, Alicante y Tenerife.
Los agentes, además, determinaron que el líder de la organización (autor principal de los ciberdelitos y destinatario final del dinero) era un ciudadano español afincado en Rumanía, por lo que, para proceder a su detención, se solicitó la colaboración de la Policía de Rumanía.
Una vez recopilados todos los medios de prueba que implicaban a los autores, se solicitó la emisión de una Orden Europea de Investigación (OEI) y una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE). Seguidamente, los agentes de Policía Nacional y Guardia Civil se desplazaron hasta Bucarest para dar apoyo a las autoridades rumanas en la cumplimentación de la OEI y la OEDE emitidas por el Juzgado de Pamplona.
La investigación la han llevado a cabo policías del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada de Policía Judicial de Navarra, y guardias civiles de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la misma comunidad. Las diligencias las está practicando el Juzgado de Instrucción nº 2 de Pamplona.