El Presidente ruso, Vladímir Putin, ha firmado una orden para refrendar el concepto actualizando la política exterior de Rusia, elaborado y presentado por el Ministerio de Asuntos Exteriores. El nuevo concepto se ha actualizado para incorporar medidas adicionales y redefinir los parámetros de las acciones necesarias, especialmente contra la confrontación coherente de Estados Unidos, Occidente y Europa, y determinar el importante papel de la Federación Rusa en el mundo multipolar emergente.
Putin explicó, en una reunión con los miembros permanentes del Consejo de Seguridad ruso celebrada el 31 de marzo, la necesidad de un importante ajuste de los documentos clave de planificación estratégica, incluido el concepto de política exterior, sobre la base de los drásticos cambios que se están produciendo en el escenario mundial.
«El Ministerio de Asuntos Exteriores, actuando en colaboración con la administración presidencial, la oficina del Consejo de Seguridad, el gobierno y numerosos ministerios y agencias, ha realizado un extenso y minucioso trabajo para actualizar y armonizar el concepto con las actuales realidades geopolíticas. Se trata de un documento equilibrado que servirá de base para nuestras acciones prácticas a medio plazo y en un futuro más lejano». dijo Putin en su discurso introductorio.
En un discurso conciso durante la reunión, el ministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, subrayó que el nuevo concepto recoge las disposiciones de la Estrategia de Seguridad Nacional, aprobada en 2021. También señala alto grado de continuidad con la edición anterior de 2016 en cuanto a los principios fundamentales de nuestra política exterior, principalmente su independencia y enfoque en la creación de condiciones externas favorables para el desarrollo progresivo de Rusia, garantizando su seguridad y mejorando el bienestar de los ciudadanos rusos.
«La lógica del documento refleja las cambiantes realidades geopolíticas, de hecho, los avances revolucionarios en el contorno exterior, que han acelerado visiblemente con el inicio de una operación militar especial», dijo Lavrov en la reunión.
Sin embargo, añadió: «En particular, se constata el nivel sin precedentes de tensión internacional en la última década. Se reconoce el carácter existencial de las amenazas a la seguridad y el desarrollo de nuestro país, creadas por las acciones de Estados no amigos. El principal iniciador y conductor de la línea antirrusa se nombra directamente a Estados Unidos de América y, en general, la política de Occidente, dirigida al debilitamiento integral de Rusia, se caracteriza como una guerra híbrida de nuevo tipo».
Se caracterizan las principales tendencias a largo plazo del desarrollo internacional, incluida la crisis de la globalización económica, que hasta hace poco se llevaba a cabo según las reglas estadounidenses. Uno de los factores es que la economía mundial está experimentando una importante reestructuración y está pasando a una nueva base tecnológica. La redistribución del potencial de desarrollo en favor de nuevos centros de crecimiento conduce a la formación de un orden mundial multipolar, y ésta es una tendencia clave en las relaciones internacionales en la etapa actual.
«En el concepto exponemos nuestra visión de los principios de un orden mundial más equilibrado y justo. Entre ellos figuran la policentricidad, la igualdad soberana de los Estados, la garantía de su derecho a elegir modelos de desarrollo, la defensa de la diversidad cultural y de civilizaciones del mundo. La ayuda al establecimiento de un orden mundial multipolar se define como una tarea marco para todos los ámbitos de la política exterior», declaró.
Se hace hincapié en la necesidad de garantizar el Estado de Derecho en las relaciones internacionales. Se proclama que el desarrollo progresivo del derecho internacional debe tener en cuenta las realidades del mundo actual. Ante las graves amenazas externas, se confirma la disposición a observar el principio de la indivisibilidad de la seguridad, pero sólo en relación con aquellos Estados y sus asociaciones que muestren reciprocidad en este asunto.
El enfoque del trabajo en la ONU se centra en aumentar la eficacia de esta organización, en reafirmar los objetivos y principios fundamentales de su Carta, que Occidente intenta socavar en sus acciones prácticas. Se consagran importantes innovaciones en cuanto a las condiciones para el uso de la fuerza en legítima defensa en el marco de la adhesión incondicional a los requisitos pertinentes del artículo 51 de la Carta de la ONU.
El concepto prevé la posibilidad de adoptar medidas simétricas y asimétricas en respuesta a acciones inamistosas contra Rusia. Se introduce la tesis sobre el uso de las Fuerzas Armadas para repeler o impedir un ataque armado contra Rusia y sus aliados. Así, Rusia declara inequívocamente defender el derecho del pueblo ruso a la existencia y al libre desarrollo.
Se revelan las disposiciones que afectan a la protección de los valores espirituales y morales tradicionales rusos, construyendo una cooperación basada en un único hito espiritual y moral, común a todas las religiones del mundo. Rechazo absoluto a las prácticas neocoloniales y a cualquier tipo de hegemonismo.
Según Lavrov, «entre las prioridades indudables están garantizar los derechos de nuestros ciudadanos y organizaciones en el extranjero, prestar apoyo a los compatriotas, contrarrestar la rusofobia, fortalecer la posición de la lengua rusa en el mundo, luchar por la verdad histórica, proteger nuestra cultura, despolitizar el deporte y establecer nuevas formas de cooperación deportiva.»
En la sección regional del concepto, se hace hincapié en los intereses estratégicos de Rusia en el contexto de la profundización de la integración euroasiática basada en el Estado de la Unión de Rusia y Bielorrusia, la Unión Económica Euroasiática, la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva, la CEI, la formación de una gran asociación euroasiática y el mayor fortalecimiento de la Organización de Cooperación de Shanghái y los BRICS.
Como recurso más importante, se está fijando el rumbo hacia el desbloqueo del potencial de la asociación estratégica con nuestros grandes vecinos: la República Popular China, la República de la India, los países del mundo islámico, así como con los Estados de la ASEAN, el continente africano, América Latina y el Caribe.
Lavrov concluyó que «se confirma el compromiso con una solución pacífica de todos los problemas que surjan en la región ártica». Las disposiciones del concepto suponen que los pasos antirrusos de los Estados no amigos serán reprimidos de forma consecuente y, si es necesario, severa».
El 31 de marzo, el Ministerio de Asuntos Exteriores de la Federación Rusa publicó en su página web el texto (en inglés, español y francés) del Concepto de la Política Exterior de la Federación Rusa, aprobado por el Decreto Presidencial nº 229 de 31 de marzo de 2023.
El documento, de 42 páginas, consta de seis secciones y un total de 76 párrafos. La versión anterior del concepto fue aprobada en noviembre de 2016. He aquí algunos aspectos importantes, como las metas estratégicas, los objetivos principales y las áreas prioritarias de la nueva política, que se basa principalmente en la Constitución de la Federación Rusa.
El lugar de Rusia en el mundo viene determinado por sus importantes recursos en todos los ámbitos de la vida, su condición de miembro permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, participante en las principales organizaciones y asociaciones intergubernamentales, una de las dos mayores potencias nucleares y sucesora (con personalidad jurídica continuada) de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).
Rusia aplica una política exterior independiente y multivectorial impulsada por sus intereses nacionales y la conciencia de su especial responsabilidad en el mantenimiento de la paz y la seguridad a escala mundial y regional.
La política exterior rusa es pacífica, abierta, previsible, coherente y pragmática, y se basa en el respeto de los principios y normas del derecho internacional universalmente reconocidos y en el deseo de una cooperación internacional equitativa para resolver los problemas comunes y promover los intereses comunes.
La actitud de Rusia hacia otros Estados y asociaciones interestatales depende del carácter constructivo, neutral o no, de sus políticas con respecto a la Federación Rusa.
Con las grandes tendencias y perspectivas de desarrollo, Rusia desempeñará su papel como uno de los principales centros de desarrollo del mundo moderno. Tiene previsto mantener la estabilidad estratégica, reforzar la paz y la seguridad internacionales; y fortalecer los fundamentos jurídicos de las relaciones internacionales y configurar un orden mundial equitativo y sostenible.
Una de sus prioridades es profundizar en los procesos de integración y buscar un sistema de cooperación global mutuamente beneficioso basado en la CEI y la UEEA combinadas, así como en los Estados de la región de Asia Central.
Rusia aspira a seguir reforzando la asociación global y la cooperación estratégica con los Estados de Asia y el Pacífico, incluidos, en primer lugar, la República Popular China y la República de la India. Además, fortificará las relaciones con los Estados de Oriente Medio y el Norte de África, basándose en la combinación de las capacidades de todos los Estados y las alianzas interestatales de las regiones, incluidas la Liga de Estados Árabes y el Consejo de Cooperación del Golfo.
El nuevo concepto también dice que Rusia se solidariza con los estados africanos en su deseo de un mundo policéntrico más equitativo y de eliminar la desigualdad social y económica, que está creciendo debido a las sofisticadas políticas neocoloniales de algunos estados desarrollados hacia África.
La Federación Rusa tiene la intención de seguir apoyando el establecimiento de África como centro distintivo e influyente del desarrollo mundial. Su prioridad en este sentido es la cooperación ruso-africana en diversos ámbitos, sobre una base bilateral y multilateral, principalmente en el marco de la Unión Africana y del Foro de Asociación Rusia-África.
En América Latina y el Caribe, dado el progresivo fortalecimiento de la soberanía y el potencial multifacético de los Estados latinoamericanos y caribeños, la Federación Rusa se propone desarrollar las relaciones con ellos sobre una base pragmática, desideologizada y mutuamente beneficiosa, prestando atención prioritaria al apoyo a los Estados latinoamericanos interesados y sometidos a la presión de Estados Unidos y sus aliados para asegurar su soberanía e independencia.
Hace hincapié en una asociación multifacética y mutuamente beneficiosa con la República Federativa de Brasil, la República de Cuba, la República de Nicaragua, la República Bolivariana de Venezuela, desarrollando relaciones con otros Estados latinoamericanos, teniendo en cuenta el grado de independencia y constructividad de su política hacia la Federación Rusa.
La mayoría de los Estados europeos siguen una política agresiva hacia Rusia, encaminada a crear amenazas a la seguridad y soberanía de la Federación Rusa, obtener ventajas económicas unilaterales, socavar la estabilidad política interna y erosionar los valores espirituales y morales tradicionales rusos, así como crear obstáculos a la cooperación de Rusia con sus aliados y socios. En este sentido, la Federación Rusa tiene la intención de defender sistemáticamente sus intereses nacionales en la Unión Europea.
El rumbo de Rusia hacia EE.UU. tiene un carácter combinado, teniendo en cuenta el papel de este Estado como uno de los centros soberanos influyentes del desarrollo mundial y, al mismo tiempo, el principal inspirador, organizador y ejecutor de la agresiva política antirrusa del Occidente colectivo, fuente de grandes riesgos para la seguridad de la Federación Rusa, la paz internacional, el desarrollo equilibrado, equitativo y progresivo de la humanidad.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de la Federación de Rusia elabora una estrategia general de la política exterior de la Federación de Rusia y presenta las propuestas pertinentes al Presidente de la Federación de Rusia, ejecuta el curso de la política exterior, coordina las actividades de los órganos del poder ejecutivo federal en el ámbito de las relaciones internacionales y la cooperación internacional, y coordina las relaciones internacionales de los súbditos de la Federación Rusa.
Fte. Modern Diplomacy (Kester Kenn Klomegah)
Kester Kenn Klomegah, redactor de MD Africa, es investigador independiente y escritor sobre asuntos africanos en la región euroasiática y las antiguas repúblicas soviéticas. Anteriormente escribió para African Press Agency, African Executive e Inter Press Service. Anteriormente había trabajado para The Moscow Times, un reputado periódico inglés. Klomegah impartió clases a tiempo parcial en el Instituto de Periodismo Moderno de Moscú. Estudió periodismo internacional y comunicación de masas, y más tarde pasó un año en el Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú. Es coautor del libro «AIDS/HIV and Men: Taking Risk or Taking Responsibility», publicado por el Instituto Panos, con sede en Londres. En 2004 y de nuevo en 2009, ganó el Premio Palabra de Oro por una serie de artículos analíticos sobre la cooperación económica de Rusia con países africanos.
