La historia del M82 comienza con Ronnie Barrett. Se dice que Barrett, un fotógrafo sin formación ni experiencia formal como armero, se inspiró para diseñar y construir el M82 de calibre 50 (12,70mm.) mientras fotografiaba una lancha patrullera fluvial similar a la empleada por las fuerzas estadounidenses durante la guerra de Vietnam. En una de las fotografías resultantes, una ametralladora del calibre 50 aparece con una silueta prominente.
Al darse cuenta de que no existía ningún fusil con recámara para el cartucho del calibre 50, Ronnie se puso en marcha. El diseño original se elaboró en su mesa de comedor, y a partir de los planos resultantes, se construyó el Barrett .50 original en un garaje con suelo de grava a partir de piezas mecanizadas a mano. Pero a pesar de los humildes comienzos, el rifle fue un éxito inmediato.
El arma se completó justo a tiempo para la Guerra del Golfo, donde hizo su debut en combate con el Cuerpo de Marines. Desde entonces, el M82 y otras versiones similares han sido puestas en servicio por varios países de la OTAN y de fuera de ella.
El arma
Con el enorme calibre .50 BMG (o el cartucho de 12,7×99 mm de la OTAN), el M82 se beneficia de una gran precisión y es capaz de alcanzar objetivos a 1.800 metros de distancia, es decir, a más de 1 milla. El arma en sí es muy grande y pesa alrededor de 30 libras (13,60Kg.), por lo que no es una plataforma particularmente móvil. Se alimenta de cargadores de 10 o 20 balas, y produce bastante retroceso.
Para mitigar un poco este retroceso y reducir la fatiga del tirador, está equipado con un gran freno de boca rectangular que dirige los gases propulsores hacia fuera y hacia los lados. El cañón está estriado, lo que reduce un poco el peso de la plataforma y ayuda a disipar el calor.
Los Barretts en servicio en el Ejército de Estados Unidos se denominan M107, y son ligeramente diferentes del original. Los cambios incluyen un raíl para accesorios más largo, así como una empuñadura trasera.
Anti-Material vs. Francotirador
Aunque el M82 suele denominarse fusil de francotirador, debería llamarse más bien como antimaterial de precisión. A diferencia de los otros fusiles de precisión de cerrojo, el M82 es un diseño semiautomático que tiene retroceso, lo que reduce su precisión.
Sin embargo, en su función antimaterial, cuando se emplea contra municiones sin explotar, u objetivos como vehículos blandos o ligeramente blindados u objetivos estáticos de gran tamaño, la falta de precisión del M82 es menos problemática.
Fte. 1945