Ya desplegado por Suecia montado sobre un camión Volvo, el Archer de 155/52 de BAE competirá en una demostración de fuego del Ejército de los EE.UU. a principios del año que viene.
El Ejército americano está buscando un sustituto autopropulsado para sus venerables piezas de artillería remolcada, que no pueden seguir el ritmo de las unidades mecanizadas dotadas con el vehículo de combate rueda Stryker, además de que carecen de protección. BAE Systems dice que su obús blindado Archer es el cañón más rápido en cuanto a entrada y salida de posición de fuego, un factor que puede ser vital en los combates del futuro.
EE.UU. está investigando intensamente cómo acelerar el proceso desde la detección de un objetivo potencial hasta el envío de coordenadas exactas del objetivo a un arma específica. Una vez que el arma reciba esas coordenadas, puede detenerse y abrir fuego en apenas 20 segundos, dijo Henrik Knape, un ejecutivo de BAE con base en Suecia, donde el arma ya está en servicio. En los dos primeros minutos después de ese primer disparo, Knape continuó, el Archer puede hacer fuego de cinco a siete veces, volver a ponerse en marcha, y poner 500 metros entre él y el lugar desde el que disparó.
Ese es tiempo suficiente, para que fuego de la artillería enemiga no sea eficaz contra él. Incluso aun adversario avanzado (digamos “Rusia»), que emplea radares especializados en contrabatería para rastrear la trayectoria de los proyectiles atacantes y calcular la posición precisa de la unidad que las dispara, le llevará varios minutos hacer contrabatería con sus propios cañones o drones.
En las operaciones del Army, el tiempo desde que se detecta un objetivo hasta que se le dispara es cuestión de «decenas de minutos». Los sistemas experimentales de inteligencia artificial pueden reducirlo a decenas de segundos, pero faltan años para estar listos.
Archer tiene otras ventajas también, Knape y su colega de EE.UU. Chris King le dijeron a un pequeño grupo de reporteros:
- Lleva en servicio en Suecia desde 2016, y el Ministerio de Defensa está pidiendo al Parlamento que financie otras 24 armas, ya que ha sido ampliamente probado en el campo.
- Está blindado contra metralla y armas ligeras.
- Su largo cañón, 155mm por 52 calibres, es un tercio más largo que el del obús estándar de EE.UU., por lo que tiene gran alcance, comparable con el obús ERCA que entró en servicio con las unidades blindadas de EE.UU. en 2023. Esta arma ya está calificada en pruebas en EE.UU. para disparar proyectiles guiados de precisión como el Excalibur de Raytheon y el propio BONUS de BAE.
- Está montado en un chasis Volvo articulado con tracción a las seis ruedas, con suficiente movilidad a campo traviesa para seguir el ritmo de las brigadas Strykers, actualmente dotadas sólo con cañones remolcados.
Hay vehículos de artillería de ruedas más pequeños en el mercado que Archer, que no encajan en el transporte turbohélice estándar C-130, señalaron Knape y King. Y ninguno de ellos, argumentan, tiene la combinación de potencia de fuego, protección y rapidez del Archer.
El secreto de esa velocidad es la automatización, dice BAE. Mientras que los sistemas actuales del Ejército de EE.UU., ambos obuses remolcados y el autopropulsado Paladín M109 blindado, todavía dependen en gran medida del músculo humano para manipular pesados proyectiles, el Archer tiene un autocargador incorporado. Las tripulaciones humanas bien entrenadas pueden disparar más rápido que los autocargadores durante breves períodos, los sistemas mecánicos no se cansan ni se lesionan, y permiten una dotación de personal mucho más pequeña. En teoría, Archer puede operar con un solo soldado a bordo, aunque está diseñado para una tripulación de tres, que pueden permanecer dentro de la cabina blindada mientras el arma dispara y se recarga.
El Ejército planea mantener su prueba de fuego en los primeros tres meses de 2021 (el segundo trimestre del año fiscal federal).
Fte. Breaking Defense
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