En un mercado naval de buques de guerra de superficie en auge, el sector de los OPV y las corbetas, sobre todo en Asia-Pacífico, ofrece cada vez más oportunidades. Informa Gordon Arthur.
La definición de las clases de buques de la Armada puede ser notoriamente arbitraria: por ejemplo, dos nuevas corbetas para la Armada de Filipinas serán mayores que sus fragatas, mientras que las fragatas australianas de la clase Hunter serán más pesadas que sus destructores. No obstante, las corbetas suelen estar mejor armadas y ser más pesadas que los patrulleros de altura (OPV).
Richard Hedström, jefe de gestión de productos de la unidad de negocio de Buques de Superficie de Saab, señaló: «La corbeta, por su tamaño y resistencia, es más adecuada en los litorales y en operaciones costeras; ése es su hábitat natural. Pero en otros aspectos, como la potencia de fuego y la capacidad de los sensores, es tan eficaz y capaz como una fragata.
«La gran ventaja de las corbetas es que proporcionan al comandante de un grupo operativo la flexibilidad y libertad de acción necesarias para operar en zonas de alta mar, a la vez que en las protegidas y estrechas aguas de un archipiélago».
Un portavoz de BAE Systems añadió también su opinión, declarando: «En términos de coste de adquisición de capital, un OPV suele costar un tercio del precio de un buque del tamaño de una fragata ligera».
El coste durante la vida útil de un OPV también será más barato, además de necesitar menor tripulación. Otras ventajas son su versatilidad, menor tamaño, necesitar menos infraestructuras portuarias, y su facilidad de construcción. El portavoz de BAE Systems añadió: «En realidad, los buques de tamaño OPV no tienen ningún inconveniente. Aunque puede que no tengan la capacidad de combate de buques mucho mayores, diríamos que ése tampoco es su propósito principal.»
¿Qué perspectivas de futuro tienen las corbetas? Hedström evaluó: «Las corbetas nunca pasarán de moda debido a su gran maniobrabilidad, velocidad, potencia de fuego y menor calado. La corbeta ofrece capacidades cruciales para afrontar con éxito las dificultades que implican los mares interiores y las aguas litorales.»
El directivo de Saab añadió: «La guerra en los fondos marinos se ha consolidado como una amenaza real, especialmente para los estados costeros, incluso en tiempos de paz. La futura armada de cualquier nación necesita hacer frente a todas las formas de amenaza del espectro, desde la guerra a gran escala hasta las operaciones en tiempos de paz, como la vigilancia de la infraestructura de los fondos marinos.
«Lo más probable es que los sistemas no tripulados apoyen cualquier tipo de operación naval. Muchas naciones lo han identificado, y nuestro cliente singapurense es una de ellas», refiriéndose a los buques de combate multirol (MRCV) de Singapur, que actuarán como naves nodriza para sistemas no tripulados, además de realizar capacidades más convencionales como la guerra de superficie.
Basados en un diseño de la Policía Federal alemana de 1.890Tn., los OPV sustituirán a cuatro buques de la clase Sentinel de 525Tn. Altamente maniobrables para las congestionadas aguas de Singapur, estarán equipados con armas letales y no letales y se entregarán a partir de 2028.
Singapur es sólo uno de los países que están modernizando sus flotas de OPV y corbetas. Según las previsiones sectoriales de GlobalData, el mercado de buques de guerra y combatientes de superficie tenía un valor de 44.200M$. en 2023 y crecerá a la tasa anual compuesta del 4,1% hasta alcanzar los 65.800M$ en 2033. Más del 60% del valor del mercado se centrará en fragatas, destructores y buques auxiliares.
Asia-Pacífico sólo irá por detrás de Norteamérica, esperándose que la región represente una cuota de ingresos del 31,6% del mercado mundial de buques de guerra y combatientes de superficie entre 2023 y 2033. Se espera que las iniciativas de modernización naval en curso para sustituir los buques obsoletos impulsen el crecimiento de este mercado regional durante el periodo de previsión.
Según previsiones de GlobalData el crecimiento del mercado de Asia-Pacífico puede atribuirse a las tensiones geopolíticas y las disputas territoriales marítimas entre países como China, India, Japón, Corea del Sur y Taiwán.
Aspiraciones del programa naval: apoyo industrial
La primera empresa naval francesa, Naval Group, ha tenido éxito con los diseños de corbetas, sobre todo con el Gowind. Entre 2017 y 2012 se entregaron a Egipto un total de cuatro de 2.800Tn., tres de las cuales se construyeron en Alejandría. Además, la primera de dos para EAU se puso en servicio en noviembre de 2023.
Sin embargo, Malasia representa un cuento con moraleja sobre los riesgos que entraña la cooperación industrial. El Astillero Naval Boustead intentó construir seis corbetas Gowind 2500 localmente, pero el programa ha estado plagado de retrasos. Ocho años después de que comenzara la construcción del primer buque, todavía no está ni cerca de su finalización, y el gobierno malasio ya ha cancelado el sexto buque.
Un portavoz de Naval Group habló de la importancia de la transferencia de tecnología. «En todo el mundo, las compensaciones, las tecnologías avanzadas, la nacionalización y la participación local son requisitos en las adquisiciones de defensa. Naval Group ve en estos requisitos una oportunidad para ampliar su huella con el objetivo constante de una cooperación en la que todos salgan ganando.
BAE Systems es otra empresa que reconoce la importancia de la transferencia de tecnología. Muchos países en desarrollo se sienten capaces de construir buques del tamaño de un OPV, y los constructores navales deben estar preparados para apoyar tales ambiciones o arriesgarse a perderlo todo. BAE Systems apoyó a Tailandia en la construcción de dos OPV de 90m. de eslora de la clase Krabi, por ejemplo.
El OEM explicó: «Hemos visto cómo aumentaba el número de competidores en la construcción de OPV y, evidentemente, la abundancia de opciones de suministro hace que conseguir futuros trabajos de exportación para todos los constructores navales sea más difícil. Esta es una de las razones por las que BAE Systems ha adoptado un modelo de diseño bajo licencia para la exportación en algunas regiones.
«El diseño bajo licencia de OPV puede ser un resultado beneficioso para BAE Systems y sus clientes… la industria de la construcción naval obtiene el trabajo y la capacidad de seguir desarrollando las habilidades de construcción naval, mientras que las armadas clientes pueden recurrir a su propia base industrial para el apoyo a lo largo de la vida útil del buque, como para su reparación y actualización.»
Estos OPV tailandeses se basan en la clase River de la Royal Navy, dos de los cuales llevan operando en el Indopacífico desde septiembre de 2021. Los HMS Spey y Tamar han visitado más de dos docenas de países y han recorrido acumulativamente más de 120.000mn.
BAE Systems declaró a Global Defence Technology: «Estos despliegues demuestran la fiabilidad inherente de estos buques, y la confianza que la Royal Navy tiene en su capacidad de recibir apoyo mediante una combinación de apoyo en tierra del Reino Unido prestado a través de instalaciones regionales asociadas.»
Dadas las ventajas de uso y coste de las OPV y corbetas, desde su utilidad, aplicaciones y posible participación de la industria local, el futuro de estos buques navales parece asegurado, un sentimiento del que se hace eco la industria.
«A medida que los presupuestos de defensa de todo el mundo se ven sometidos a presión cada vez mayor, las OPV se consideran a menudo el tipo de buque rentable ideal para proporcionar la seguridad marítima esencial contra las actividades ilegales e ilícitas. Además, con una amplia gama de usuarios entre las armadas, guardias costeras y las agencias de seguridad fronteriza, los OPV tienen un atractivo universal», concluyó el portavoz de BAE Systems.
Fte. Naval Technology